un hotel fantástico donde te reciben con un regalo especial para tu perro, además de una atención muy cálida por parte del personal

El hotel tiene un ambiente acogedor con habitaciones limpias y muy confortables. Me encantó la amabilidad del personal. Un detalle especial fue el regalo para mi mascota que lo hizo aún más especial.

El hotel tiene una decoración elegante y un ambiente moderno. La habitación resultó ser bastante limpia, con una buena insonorización que permitió un descanso perfecto. La amabilidad del personal me impresionó, especialmente Manon en recepción, quien fue muy servicial. El desayuno estuvo bien, aunque podría mejorar en variedad, especialmente en opciones saladas. La cena no fue lo mejor, pero el trato en el restaurante fue atento y se esforzaron por hablar español. La ubicación es conveniente para acceder a las carreteras, pero está lejos del centro. Un punto negativo que noté fue la falta de ascensor, lo que puede ser un inconveniente si llevas equipaje pesado. En general, es una buena opción para noches de paso, gracias a su relación calidad-precio y a la atención del personal.

El desayuno fue un auténtico festín, con croissants tan frescos que parecían haber hecho una danza de la felicidad antes de llegar a la mesa. Además, la cercanía a los castillos del Valle del Loira es como tener un recorrido turístico privado justo al lado de la habitación.

Camas algo duras

Pasé una noche en una habitación doble. La cama era cómoda y pude descansar muy bien. El desayuno tuvo una selección adecuada a buen precio. La cercanía a un centro comercial facilita las compras y la cena. Recomendable para una parada rápida.

Hotel fácil de llegar, habitaciones impecables e insonoras. A nuestro perro lo recibieron con un detalle especial, ¡el colmo del lujo canino!

Las habitaciones son tan pequeñas que a mi perro le costó encontrar el espacio para dar la vuelta.

recomendaría a todos este lugar for dar paseos

Habitaciones limpias, personal amable, y la tranquilidad del entorno, junto con la buena cocina del restaurante hacen que esta sea una elección ideal para quienes buscan descansar después de explorar la ciudad.

Todo ha ido genial

Habitaciones pequeñas, pero todo muy limpio. Servicio amable y buena conexión Wi-Fi.

La habitación era pequeña, pero estaba impecable y muy tranquila. Las camas eran cómodas, lo que me ayudó a descansar bien. Además, me encantó la atención que le brindaron a mi perro, con un detalle especial. El acceso desde la carretera es súper fácil, aunque sí noté que no hay ascensor, lo que podría ser un problemita si viajas con mucho equipaje.

La facilidad para llegar desde la carretera, la amabilidad del personal, la limpieza impecable de las habitaciones y la comodidad de las camas fueron simplemente excepcionales.

Me alojé 3 noches en Ibis Tours y fue una experiencia muy positiva. Las habitaciones eran amplias y confortables, ideales para descansar después de visitar los castillos. La atención en el restaurante grill fue excelente, aunque el desayuno podría mejorar un poco en variedad.